Collie Beag es una casa familiar a medida construida en un pequeño bosque en Cambridgeshire. El desafío para el arquitecto fue crear una casa contemporánea que se integrara en el paisaje natural y que permitiera una constante conexión visual con el exterior.
El diseño final incluyó una gran cantidad de cristales de techo a suelo que requirieron soluciones de protección solar interior. Las cortinas Wave fueron una opción obvia, sus líneas limpias se combinaron perfectamente con el revestimiento exterior de madera acanalada. El tejido Colorama 1, combinado con una iluminación sutil, brindó calidez y privacidad por las noches, y la elegante parte posterior apilable de Wave aseguró que la vistas no pasaran desapercibidas durante el día. Otras ventanas más pequeñas se dotaron de sistemas enrollables y venecianas.